Visitamos Mio Buenos Aires, un hotel boutique 5 estrellas en el pintoresco barrio de Recoleta, en Capital Federal. Si quieren vivir una experiencia en donde todos los detalles los sorprendan gratamente, les recomendamos visitar este lugar.
Mio Hotel sorprende con su imponente puerta de entrada que mide 6 metros y está hecha con viejos toneles de vino de roble francés. Las puertas de las habitaciones también están confeccionadas de esa manera, lo que brinda una sensación de calidez y distinción.
La recepción nos adelanta que encontraremos detalles sorprendentes a lo largo de todo el hotel. Muy cerca de este sector hay una biblioteca, un espacio de trabajo con computadoras de escritorio y un bar que sigue la misma linea de decoración, donde por la mañana, se puede tomar el desayuno. En este espacio también, hay un encantador patio adornado por una cascada.

Si bien hay diferentes categorías de habitaciones, todas tienen un denominador común: diseño sofisticado, que no dejara al huésped indiferente. Como por ejemplo, el detalle de que los ambientes no tienen paredes internas, todo está conectado, lo que resulta en habitaciones amplias y luminosas. Algunas cuentan, además, con terraza y jacuzzi privado.
Nos alojamos en una Junior Suite. Tal como les contamos, era un ambiente amplio y luminoso, con un balcón hermoso y un sillón enorme. La cama cómoda con ropa blanca de excelente calidad. Batas, amenities, cafetera, minibar y hasta un parlante que sonaba increíble para conectar el celular y acompañar la estadía con música. Detalles de cortesía tales como agua y chocolates fueron parte de la experiencia maravillosa que vivimos.
Y como si esto fuera poco, no podemos dejar de destacar, eso que nos maravillo desde antes de llegar al hotel, cuando lo vimos en fotos: las bañeras que se encuentran en medio de cada suite. Hechas a partir de madera de caldenes por el artista Mario Dasso, creadas especialmente para el hotel, cada pieza es única.
En el octavo piso del edificio encontraran el spa donde podrán disfrutar de una pileta efecto jacuzzi, baños de vapor, gimnasio, jugos naturales y la posibilidad de vivir distintas terapias de masajes.

El desayuno fue uno de los mejores que disfrutamos en nuestros viajes. No solo por la variedad sino por la calidad, todo era muy rico. Había muchísimas opciones, cosas saludables (kéfir, agua de coco, leche de almendras) y otras muy tentadoras… Nuestras preferidas fueron la tarta de coco y dulce de leche, el chipá calentito y los sándwiches. ¡El café, exquisito también y la máquina que lo hace es tan tecnológica que parece del futuro!
Alojarse en Mio Hotel es sumamente recomendable. Así sean de Buenos Aires, creemos que es una experiencia recomendable para ser turistas en la ciudad y evitar la rutina. Es ideal para relajarse y disfrutar de cada detalle. En Mio Hotel todo esta pensado para lograr que el huésped viva una estadía 5 estrellas. Volveríamos sin dudarlo. Si quieren saber más sobre Mio Hotel pueden hacer clic aquí y visitar su web. Y por supuesto, cuando se alojen, nos cuentan en los comentarios su experiencia, nos encanta saber de ustedes!…